Editorial
El apocalipsis y sus jinetes
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Por Ing. Jorge Calzoni | Rector de la Universidad Nacional de Avellaneda
La tecnocracia, o movimiento tecnocrático, acumula ya un siglo desde su surgimiento en los Estados Unidos. Sin embargo, es indudable que la aceleración sin precedentes que ha experimentado en las últimas décadas, ha renovado de manera cada vez más preocupante tanto sus alcances como aquello que se ha ido desarrollando en su interior, hasta convertirse en una pesada amenaza.
Es a propósito de ello que giró la interesante jornada organizada por Infoworkers el 10 de junio pasado, bajo el elocuente título de “Los cuatro jinetes del apocalipsis tecnocrático”. Con base en las disertaciones de Jonathan Taplin y Manuel Castells, estuvo animada por el diálogo con un panel compuesto por Humberto Podetti, Oscar Lamberto, Carlos Gaitán y quien escribe estas líneas.
Infoworkers es un notable grupo presidido por Jorge Zaccagnini que nació al calor de la alfabetización digital y fue creciendo en integrantes y propósitos y tiene como bandera fundacional la soberanía tecnológica.
Manuel Castells es un sociólogo y profesor universitario español, ex ministro de Educación en su país y uno de los pensadores contemporáneos más destacados. Jonathan Taplin, por su parte, cuenta con una larga trayectoria, nutrida de actividades tan diversas como enriquecedoras: fue productor del Premio Nobel Bob Dylan, y de algunas de las películas de Martin Scorsese (ganador de un Premio Óscar, tres Premios BAFTA y tres Premios Globo de Oro). En la actualidad, Taplin vive en Silicon Valley y es autor de The End of Reality: How Four Billionaires are Selling a Fantasy Future of the Metaverse, Mars, and Crypto (El fin de la realidad: cómo cuatro multimillonarios están vendiendo un futuro de fantasía del metaverso, Marte y Crypto). Lo que este libro se propone poner en discusión es cómo comprender el papel que, en la escena contemporánea, cumplen Elon Musk, Peter Thiel, Mork Zuckerberg y Marc Andreessen, a quienes llama tecnócratas.
Entre otras referencias, Taplin toma lo desarrollado en el último libro del analista geopolítico Ian Bremmer (del grupo Eurasia) Nosotros y ellos: el fracaso del globalismo, en donde se describe, acertadamente, el mundo que los tecnócratas han creado, y en el que:
• Su información personal es pirateada.
• Los algoritmos alimentados con datos sesgados toman decisiones destructivas que afectan la vida de miles de millones de personas.
• Las turbas en línea crean caos, incitan a la violencia y las chispas se extienden sobre las existencias.
• Decenas de millones de personas son arrastrados por los agujeros de conejo de las teorías conspirativas.
Lo cínico que todas estas realidades tienen en común, es que emanan desde el espacio digital, en el que un puñado de grandes empresas tecnológicas —no los gobiernos— son los principales actores y ejecutores.
La exposición de Taplin se detuvo en estos elementos, mientras que Castells completó su análisis basado en la centralidad del texto y la actualidad descarnada de la búsqueda de un regreso a una vida sin Estado, es decir una sociedad medieval, previa a los Estados Nación.
Les invito a buscar en el portal de Infoworkers las exposiciones, así como la participación del panel. Allí, Humberto Podetti abordó el tema desde lo religioso, Oscar Lamberto desde lo político y Carlos Gaitán desde lo gremial.
Por mi parte, el planteo estuvo enfocado desde lo educativo y, en función de los conceptos vertidos, pregunté cómo es posible imaginar la enseñanza en este tiempo, en particular la enseñanza en la educación superior y su vínculo con los Estados. La respuesta de Taplin fue que “la supervivencia de la universidad necesitará anclarse en la enseñanza de la historia y las humanidades. Durante años observé a mi universidad invertir la mayor parte de sus recursos en la Escuela de Ingeniería, en respuesta a la demanda del mercado. Pero ahora, lo único que la IA generativa parece hacer bien es escribir códigos informáticos. Entonces, todas esas personas que pidieron prestados miles de dólares para aprender informática pueden dar cuenta que son los primeros en ser reemplazados por la IA. En su libro Sapiens: De animales a dioses: Una breve historia de la humanidad, Yuval Noah Harari define el concepto de Homo sapiens como el del único animal capaz de creer en cosas que existen puramente en su propia imaginación, como dioses, Estados y dinero. Esta capacidad de crear y creer en realidades imaginadas es lo que distingue al Homo Sapiens y le ha permitido dominar el mundo. No se aprende a contar historias en informática”.
No es nuestra intención —por si fuera necesario dar cuenta de ello— propiciar un escenario apocalíptico. Lo que nos parece crucial es tomar nota de los peligros de este momento (de Argentina y del mundo) para comprender la acuciante necesidad de, por un lado, registrar las expectativas que nuestra sociedad tiene depositadas en la educación pública universitaria (expresada con absoluta elocuencia el pasado 23 de mayo) y, por el otro, reconocer que no hay tiempo que perder, puesto que ya hay quienes vienen galopando.
